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viernes, 2 de septiembre de 2011

La Pequeña Empresa en el Discurso de Danilo

El candidato presidencial por el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Lic. Danilo Medina, acaba de afirmar en su discurso de proclamación de la candidatura, que las micro, pequeñas y medianas empresas constituirán una prioridad durante su gestión de gobierno. Prometió también implementar acciones a favor de la industria metalmecánica, la producción de pan, la fabricación de muebles, el comercio, y la producción agrícola y pecuaria, sectores a través de los cuales se lograría la creación de una cantidad importante de nuevos empleos, se disminuiría la marginalidad y se combatiría la pobreza. Enfatizó, además, en que el turismo será la locomotora del desarrollo, con la aspiración de que al país vengan 10 millones de turistas, y que esto pueda tener un efecto multiplicador positivo en el resto de la economía.

Este discurso podría ser evaluado como extraordinario si no fuera porque la población dominicana está acostumbrada a las promesas electorales, con la conciencia clara de que muy poco de lo que prometen los políticos en campaña, se cumple. Sin embargo, guardando el espacio para la duda, el Lic. Medina pudiera llenarse de gloria si, en materia de apoyo y fomento a las MIPYMES lograra: a) continuar lo que está bien, que no es mucho; b) corregir lo que está mal, que es posible, factible y necesario; y c) hacer lo que nunca se hizo pues, de hecho, está todo por hacerse. Bajo este escenario, veamos el siguiente balance:

  • Continuar lo que está bien en cuanto al apoyo a las MIPYMES. 

Nadie duda de la importancia de este tipo de unidades productivas para la generación de empleo, la contribución al PIB y la estabilidad social. En efecto, según estimaciones realizadas, estas generan alrededor de un 30% de los empleos y cerca de un 25% del PIB. Por demás, la mayoría de los empleos que se han generado en los últimos años provienen del Sector Informal, caldo de cultivo natural para la aparición de las microempresas. Se evidencia, entonces, que casi sin proponérselo los gobiernos dominicanos han incentivado la generación del empleo informal, de bajos salarios y escasa productividad, a partir del fomento de una estructura productiva bastante rígida que dice crecer, pero sin efectos en el empleo y en los salarios, no importa si estos son “decentes o indecentes”.

De esta manera, del balance realizado se revela que incentivar la creación de una mayor cantidad de MIPYMES es, quizás, lo mejor que ha hecho el Gobierno, aunque esto no haya sido planificado ni sea el producto de un proceso organizado y estructurado con objetivos y resultados esperados. Asimismo, la promulgación por parte del Poder Ejecutivo de la Ley 488-08 que crea el marco regulatorio y de incentivos para las MIPYMES es, sin temor a equivocarnos, un acierto adicional del Gobierno en esa área. Resulta atinado, también, el hecho de que algunas instituciones estatales hayan comenzado a comprarle de manera formal a las MIPYMES, tal y como lo establece el Artículo 25 de esta ley, aunque esta acción no está generalizada entre los funcionarios públicos.

Otro acierto del Gobierno fue la creación de PROINDUSTRIA mediante la promulgación de la Ley 392-07, a partir de la cual se establecen prerrogativas y beneficios especiales para la industria. En ese mismo sentido, y aunque no mucha gente lo sabe, vale la pena resaltar la creación y funcionamiento del Programa de Incubación de Empresas (PROINCUBE), así como del Centro de Aceleración de Empresas de San Cristóbal, iniciativas que han permitido apoyar el desarrollo de una gran cantidad de nuevos emprendimientos.

Un esfuerzo importante que pudiera continuarse apoyando durante una eventual gestión de Gobierno de Medina es el Consejo Nacional de Competitividad (CNC), cuyas acciones han impactado positivamente a grupos empresariales que agrupan a pequeñas y medianas empresas. De manera particular, ampliar el mecanismo de los Cluster pudiera ser una estrategia valedera hacia futuro. Por último, se deberían profundizar los esfuerzos que hasta el momento viene realizando la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) a fin de facilitar, a través de diferentes mecanismos, la formalización y el cumplimiento de las obligaciones impositivas por parte de las MIPYMES.



  • Corregir lo que está mal en cuanto al apoyo a las MIPYMES 
Está mal que PROMIPYME haya pasado de ser un instrumento serio de apoyo a las MIPYMES a un mecanismo politiquero para la solución de problemas personales de funcionarios, empresarios y relacionados particulares. También está mal que se nombre en PROMIPYME a gente que, salvo honradas excepciones, no tenían ni la más mínima idea de lo que es el diseño y ejecución de programas de fomento a este importante sector de la economía. Está mal que a casi tres años de promulgada la Ley 488-08, aún no se hayan elaborado ni aprobado los Reglamentos que posibilitan su adecuada implementación.

Constituye un desacierto el hecho de que no se le asignen recursos a PROINDUSTRIA, cuando esta institución tiene la función de implementar políticas y acciones en beneficio de las micro, pequeñas y medianas industrias, y cuando tiene una gran cantidad de proyectos de puesta en operación de parques y distritos industriales, los cuales constituirían un mecanismo idóneo para la creación de empleos productivos vía la instalación de nuevas empresas.



  • Hacer lo que nunca se hizo en materia de fomento a la pequeña empresa. 
Si Danilo Medina se quisiera casar con la gloria, lo puede lograr haciendo lo que nunca se ha hecho en materia de apoyo a las MIPYMES. En ese sentido, debería:

a) Realizar un censo nacional de las MIPYMES para saber, a ciencia cierta, cuántas son, dónde están, cuánto empleo generan, cuáles son sus características y necesidades, cuáles son sus principales demandas, y cuáles son sus niveles de competitividad e inserción a la economía mundial. A partir de ahí, se definían políticas públicas que apunten hacia resolver los diferentes problemas identificados, con una visión estratégica y de largo plazo.

b) Diseñar e implementar un Programa Nacional de Transformación Productiva de las MIPYMES, a partir del cual se promueva la renovación tecnológica y la innovación a nivel de las empresas de menor tamaño relativo. Esto conduciría a mejorar los niveles de productividad de este tipo de empresas y, por vía de consecuencia, a reducir costos y elevar los niveles de ganancia.

c) Diseñar y poner en práctica un Programa Nacional de Formalización de las MIPYMES, de modo que estas puedan no solo organizarse internamente, sino también cumplir con los requisitos que le permitirían ser proveedoras del Estado. Sería oportuno, además, que a nivel nacional las alcaldías regulen la creación y funcionamiento de vendedores ambulantes y microempresas de todo tipo, lo cual puede hacerse a través del otorgamiento de una licencia anual de operación.

d) Transformar a PROMIPYME en un Instituto de Apoyo y Fomento a las MIPYMES, para que deje de ser una guarida de obtención de préstamos de origen politiquero, y se convierta en una verdadera entidad de servicios de desarrollo empresarial. En ese caso, la idea es que PROMIPYME solamente actúe como financiador de segundo piso, otorgando préstamos a organizaciones privadas que ya tienen una experiencia y un éxito reconocido en el mercado de financiamiento a las MIPYMES, y que se concentre en ofrecer Asistencia Técnica que hasta ahora es prácticamente inexistente.

e) Limitar la aprobación de solicitudes para la creación de agrupaciones empresariales que dicen representar a la micro, pequeñas y medianas empresas, la mayoría de las cuales son organizaciones fantasmas que funcionan en la casa y mente de su presidente/creador. Esto ayudaría a identificar interlocutores válidos y también a organizar de una mejor manera a este sector.

f) Destinar una mayor cantidad de recursos a las instituciones gubernamentales que ofrecen servicios a las MIPYMES, sobre todo a PROINDUSTRIA y a PROMIPYME.

g) Obligar a las entidades gubernamentales a cumplir con el Artículo 25 de la Ley 488-08, el cual establece que “las instituciones estatales, al momento de realizar las compras de bienes y servicios, deben de efectuar el quince por ciento (15%) de las mismas a las MIPYMES”.

h) En el marco de lo que nunca se ha hecho, el establecimiento de un Fondo de Capitalización con Participación Accionaria de las MIPYMES debería ser una prioridad para la próxima gestión gubernamental. Este fondo se alimentaría de los fondos actuales que dedica PROMIPYME a financiar de manera directa a estas unidades productivas, más un aporte extraordinario del Gobierno, pero de verdad, de Dos Mil Millones de Pesos, más un aporte de los propios pequeños y medianos empresarios, el cual se realizaría mediante el pago de una prima que se cargue a la tasa de interés de los préstamos que se le otorguen. Esa prima sería la parte accionaria del micro, pequeño y mediano empresario.

i) La innovación en las MIPYMES debe ser un tema obligado para una nueva gestión de Gobierno. No existen posibilidades de que las unidades de menor tamaño relativo crezcan, se expandan, y sean competitivas si no se empieza por resolver el problema de la innovación. Obviamente, esto requiere el concurso de las Universidades quienes están llamadas a conducir los procesos de investigación que constituyen el punto de partida para la innovación. De ahí la necesidad de establecer una gran alianza estratégica entre las MIPYMES y el sector universitario.

j) Por último, la internacionalización de las MIPYMES debe ser un tema relevante para un nuevo gobierno por las implicaciones que tiene para mejorar los niveles de exportación de la economía dominicana. Actualmente, menos del 8% de las MIPYMES tiene vocación exportadora y esto, si queremos hacer algo que nunca se ha hecho, debemos cambiarlo.

Finalmente, es claro que el mundo no marcha bien, que los problemas económicos y financieros de las naciones hoy en día, amenazan con generar un shock laboral de repercusiones impredecibles. Por ello, es un momento en que los gobernantes deben ser creativos, imaginativos e innovadores, que entiendan que “una buena política y un crecimiento saludable son el mejor antídoto contra toda forma de desempleo” y pobreza, lo cual encuentra su remedio definitivo en el fomento y apoyo a las micro, pequeñas y medianas empresas.

*Este artículo fue escrito por Franklin Vásquez para el LISTÍN DIARIO. Puede ver la publicación aquí.

domingo, 28 de agosto de 2011

Programa 078 - Invitado: Lic. JULIO SANZ, Vocero del Candidato Presidencial por la Alianza por la Democracia APD.


Esta semana, nuestro Productor y Conductor, el economista Franklin Vásquez, le realizó una entrevista al Lic. Julio Sanz, Vocero del Candidato Presidencial por la Alianza por la Democracia (APD), Dr. Max Puig. Con el Lic. Sanz se analizó la Propuesta de Gobierno de la APD.

También, en el Resumen Económico de la Semana, se analizó la propuesta de los millonarios Bill Gates y Warren Buffet de darle al Estado parte de la riqueza acumulada para que este pueda hacerle frente a los problemas de déficit que presenta.

Por otro lado, en el Segmento CLICKSRaquel Michelena y Heraldo Suero nos hablaron sobre los efectos de la salida de Steve Jobs de la empresa Apple y el posible impacto a la innovación de sus productos.






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